martes, 14 de noviembre de 2017

Sexualidad
Orientación sexual y Parafilias





Gracias a que el ser humano tiene libertad de pensamiento cada persona tiene diferentes gustos y aunque es algo normal muchas personas de mente cerrada no entiende que cada quien tiene la libertad de hacer con si mismo lo que quiera mientras no lastime a nadie.
En este folleto se te explicara que son los gustos diferente y en que consisten

La mejor forma de de dividir los gustos es en dos







Orientación sexual







Empecemos con los distintos tipos de orientaciones sexuales.la orientación sexual, tendencia sexual o inclinación sexual se refiere a un patrón de atracción sexual, erótica, emocional o amorosa a determinado grupo de personas definidas por su sexo. La orientación sexual y su estudio, pueden ser divididos en cuatro principales partes, siendo la heterosexualidad  (atracción hacia personas del sexo opuesto), la homosexualidad (atracción hacia personas del mismo sexo), la bisexualidad (atracción hacia personas de ambos sexos) y la asexualidad (no hay atracción sexual).1​ La asexualidad es la falta de orientación sexual. El comportamiento sexual humano, la identidad de género y la identidad sexual son términos relacionados con la orientación sexual, ya que psicológicamente conforman la percepción sexual en una persona. La preferencia sexual sugiere un grado de elección, que determina la vida sexual de una persona al establecer un género como objeto de deseo, por lo que es incorrecto utilizar el término para referirse a la orientación sexual de una persona.2​ La concordancia o discordancia se refiere a la relación o similaridad entre preferencia sexual y la orientación sexual. Se aplica el término concordancia a una persona cuyas preferencias sexuales coinciden con su orientación sexual (por ejemplo: un varón declarado homosexual que sostiene relaciones sexuales con personas del género masculino), mientras que discordancia se refiere a la diferencia entre la preferencia sexual y la orientación sexual (por ejemplo: una mujer declarada heterosexual que siente atracción sexual a personas del género femenino, que sostiene relaciones sexuales con personas del género masculino y que prefiere ser llamada heterosexual)

Existen muchos otros  tipos de orientaciones sexuales aparte de las anteriormente nombradas cada una para cada tipo de persona, ejemplos de estas orientaciones serian las siguientes:


·         El cisgénero corresponde a un término social aplicado a aquellas personas que poseen determinada identidad de género concordante con los papeles sociales que son asignados al sexo biológico de determinada persona. Alineamiento entre identidad de género, sexo biológico y comportamiento acorde al género biológico, tal es el caso de una persona que nació siendo varón y se identifica a sí mismo dentro del género masculino; una nacida como mujer que se identifica en el género femenino. Esto al contrario de una persona transgénero (Nacida varón que se identifica a sí misma en el género femenino; nacido mujer que se identifica a sí mismo en el género masculino). Diversas cuestiones sociales determinan la presencia del cisgénero, basándose en la normatividad de género (lo que la sociedad identifica como "correcto" en cada género biológico). Algunos elementos y concepciones incluyen normalmente: la expresión de la sexualidad, el comportamiento sexual humano, la orientación sexual, la identidad de género, la forma de vestir, el desempeño laboral, los manierismos, la expresión emocional, etc.



·         Transgénero es un término global aplicado a la discordancia entre la identidad propia del género, el género biológico y los roles sociales asignados a determinado género. La identidad transgénero no implica una orientación sexual específica, ya que cualquiera puede estar presente. Existen diferentes identidades transgénero que pueden o no estar ligadas a determinada orientación sexual.


·         Monosexualidad define un patrón de comportamiento dentro de las identidades de la orientación sexual que se refleja como la atracción emocional o sexual hacia un determinado género o identidad de género. Dentro de este espectro suele clasificarse la heterosexualidad y la homosexualidad por representar únicamente la atracción hacia un sólo grupo específico de personas. La monosexualidad puede derivar en la atracción hacia personas que pertenecen a un grupo específico de personas, bajo las características de su género biológico o su identidad de género, incluyendo la posibilidad de un espectro extraordinario a la clasificación convencional de los géneros binarios.En un concepto más alejado de la clasificación de la orientación sexual, suele decirse que la monosexualidad define un patrón de comportamiento sexual en el que se prefiere la interacción sexual con sólo una persona; haciendo referencia a la fidelidad de pareja, la dependencia, la demisexualidad o la atracción específica por una sola persona.


·         Polisexualidad refiere a un patrón de comportamiento en el que se siente atracción sexual o emocional hacia varios grupos de personas de determinado sexo biológico o identidad de género, de manera opuesta a la monosexualidad. El término no debe ser confundido con los términos pansexualidad y poliamor, ya que hacen referencia a distintos patrones dentro del comportamiento sexual.La polisexualidad se distingue de la pansexualidad por representar únicamente la atracción hacia algunos grupos de personas de determinado sexo o identidad de género, mientras que la pansexualidad refiere a la atracción plural por distintos grupos específicos de personas en los que se encuentran los géneros binarios y las distintas identidades de género. Dentro de la polisexualidad puede incluirse la atracción hacia ambos géneros binarios o hacia identidades de género que no se encuentran dentro del espectro de los género binarios. Diferenciado del concepto de poliamor que refiere a la flexibilidad poligámica de la aceptación de más de una pareja sexual.



·         La pansexualidad u omnisexualidad es una orientación sexual humana caracterizada por la atracción por otras personas independientemente de su sexo y su género. Por eso, pueden sentirse atraídas por varones, por mujeres y también por aquellas personas que no se sienten identificadas con la dicotomía varón/mujer o con la de masculino/femenino, incluidas las personas intersexuales, intergéneros, cisexuales y transexuales. La pansexualidad es la capacidad de desear sexualmente a otra persona independientemente de su género. Los pansexuales afirman que para ellos el sexo y el género son conceptos vacíos de significado o que no tienen importancia.



·         Demisexualidad es un término acuñado por Asexual Visibility and Education Network que refiere a la atracción sexual exclusivamente hacia personas con las que previamente se han desarrollado lazos emocionales estables y de cierta duración. Antes de ello, el demisexual se comporta como un asexual e incluso puede llegar identificarse como tal. La demisexualidad puede ser de fijaciones hetero y homosexuales que se desarrollan en una atracción sexual secundaria hacia personas con las que se han desarrollado estrechos vínculos amorosos, mientras que como atracción sexual primaria se manifiesta una aparente orientación asexual. Normalmente, las relaciones comienzan por la etapa primaria (atracción física) y en algunos casos se llega a la secundaria (sentimientos profundos de amor, cariño, lealtad y compromiso), siendo muy común que sin un interés físico no se cultiva la relación de pareja. En otros casos se decide no pasar de ahí (relaciones muy esporádicas o únicamente sexuales, etc). En la demisexualidad ocurre al contrario; para alcanzar la etapa primaria hay que alcanzar antes la secundaria



·         Antrosexualidad es un término aplicado a aquellas personas que desconocen su orientación sexual, pero existe una flexibilidad sexual que les permite desarrollar vínculos amorosos con cualquier persona de cualquier género e identidad. La antrosexualidad combina la demisexualidad, la bisexualidad y la pansexualidad, pero a diferencia de estas, el antrosexual desconoce su orientación sexual.



·         Lithesexual se refiere a las personas que tienen este tipo de orientación sexual experimentan  atracción hacia otras personas, pero no sienten la necesidad de tener que ser correspondidas. Algo similar a un amor platónico.



Evolución y origen
Existen distintas teorías que relacionan el origen de la orientación sexual como el producto de una serie de determinaciones biológicas y sociales a las que se somete el individuo durante su etapa pre-natal o post-natal. Las teorías queer modernas que refieren al origen de la orientación sexual suelen favorecer la teoría de que la orientación sexual se debe completamente a eventos biológicos que ocurren en la etapa pre-natal del individuo, rechazando los componentes sociales y su influencia en la vida del individuo debido a una nula relación entre las relaciones familiares y la orientación sexual de una persona.31​32​ Los estudios de la orientación sexual suelen estar principalmente enfocados al origen de la homosexualidad y la bisexualidad en el comportamiento sexual humano, ya que se presupone a la heterosexualidad como un modelo natural propio de la reproducción sexual, aunque también la heterosexualidad sea objeto de estudio.

Origen biológico

El origen biológico de la orientación sexual suele ser explicado en diversas teorías. En diversos estudios sobre el origen biológico de la orientación sexual suelen identificarse tres dimensiones biológicas principales que podrían ser determinantes de la orientación sexual y diversos factores del comportamiento sexual humano; en estas dimensiones se clasifican las teorías por su origen genético, por su origen hormonal y por su origen estructural.

Dentro de las teorías de origen estructural, meramente biológicas, se encuantran las teorías de la naturaleza sexual animal y la homosexualidad en animales, además la fisiología humana que comprende el sistema nervioso en relación con la orientación sexual y la teoría rechazada de que las orientaciones queer se deban a los efectos patológicos de un virus. Las teorías que corresponden a la explicación de la orientación sexual como origen genético normalmente basan sus teorías en la posibilidad de existencia de un gen específico o modelo de determinación evoluctiva que explique las distintas variantes de la orientación sexual. Las teorías que corresponden a la explicación de la orientación sexual como origen hormonal suelen hacer hincapié en la determinación bioquímica de la orientación sexual, producto de la alteración de la acción del hipotálamo debido a su exposición a agentes hormonales sexuales en la etapa pre-natal.

Naturaleza animal

La heterosexualidad es un tipo de comportamiento frecuente en distintas formas del reino animal debido a su estipulación natural como precursor reproductivo en las especies animales que rigen su ciclo reproductivo por la reproducción sexual, identificado naturalmente con la complementación de las manifestaciones del dimorfismo sexual gonádico, es decir, las características reproductivas naturales que identifican a los géneros binarios de determinada especie animal. La heterosexualidad se manifiesta como un modelo biológico natural que complementa el proceso y necesidad natural de las especies de la continuidad de la misma, basándose en la modificación evolutiva mediante la combinación del material genético de ambos progenitores para producir descendencia con características singulares que combine los atributos de dos muestras de la misma especie, desencadenando una mutación que permita la perpetuidad de la especie en el modelo de la selección natural.34​ Las características evolutivas de la selección natural permiten el desarrollo de adecuaciones corporales que permitan la fecundación y la combinación genética de dos individuos de la misma especie en un producto generacional. Naturalmente, las especies que rigen su ciclo reproductivo de acuerdo a la reproducción sexual, presentan órganos especializados que facilitan la fecundación en el acto de la cópula o apareamiento.
La homosexualidad y la bisexualidad son patrones de comportamiento sexual que pueden ser apreciados en alrededor de 1500 especies animales que, pueden o no, tener una relación evolutiva con la familia Hominidae a la que pertenece el Homo sapiens. La homosexualidad y la bisexualidad son recurrencias poblacionales en distintas especies animales que se manifiestan como una variante biológica del comportamiento sexual animal. En las especies animales que manifiestan conducta homosexual suelen observarse patrones de comportamiento comunes que no necesariamente involucran la cópula homosexual, sino que, en algunas ocasiones, puede manifestarse simplemente como la necesidad de un individuo de establecer vínculos biosociales con individuos de su mismo género biológico.
La observación del comportamiento homosexual animal en especies es originado de un estudio contemporáneo de los modelos queer que intentan fundamentar el comportamiento homosexual humano como una variante biológica común en distintas especies. En el estudio de los patrones de homosexualidad animal se reconoce a Joan Roughgarden, Bruce Bagemihl y Paul Vasey como los introductores globales de las investigaciones sobre la naturalidad homosexual en especies animales ajenas a la humana. Los patrones de comportamiento sexual animal relacionados con la homosexualidad y la bisexualidad se manifiestan en una menor recurrencia poblacional que la heterosexualidad.20​ La poca recurrencia de orientaciones distintas a la mayoría sexual heterosexual se sustenta bajo el modelo tradicional de la demografía de la orientación sexual, lo que podría suponer una variante biológica poco frecuente en el comportamiento sexual de diversas especies animales.33​
La asexualidad puede manifestarse como un tipo de comportamiento sexual animal con poca recurrencia poblacional, ya que su origen biológico se atribuye a la determinación fisiológica y la capacidad hormonal de un individuo. La teoría sugiere la determinación de la asexualidad como la baja o nula respuesta sensitiva de la testosterona en función de la excitación sexual o un tipo de determinación in utero. El modelo de la asexualidad animal basa su especificación en el modelo de la homosexualidad animal, debido a la existencia poblacional de individuos pertenecientes a especies animales que no han sido castrados, los cuales no experimentan ningún tipo de comportamiento sexual heterosexual u homosexual.37​38​39​

Gay virus

El gay virus o gay germ es una teoría rechazada y no fundamentada del origen biológico de la homosexualidad, cuyos principios sugieren la existencia de un virus humano que provoca el comportamiento homosexual. La teoría fue propuesta por Gregory Cochran y Paul W. Ewald como una explicación del comportamiento homosexual humano relacionado con las posturas clínicas de la teoría microbiana de la enfermedad. La teoría establecía que la homosexualidad era un comportamiento ocasionado por la presencia de un virus, el cual desencadenaba respuestas patológicas que derivaban en la alteración de la estructura cerebral del supuesto infectado. Cochran y Ewald concluyeron que el supuesto virus se concentraba en zonas urbanas, cuyos habitantes eran más propensos a contraer el virus ya que existía un mayor índice poblacional de personas out en zonas urbanas.40​

Estructura cerebral y orientación sexual

La teoría de la estructura cerebral en relación a la orientación sexual se basa en el análisis estructural y fisiológico de la conformación cerebral y la manifestación de diferencias físicas entre personas heterosexuales y personas homosexuales (diferencias obtenidas del análisis del hipotálamo, sección encefálica determinante en los procesos naturales del comportamiento sexual humano).31​ La teoría de la estructura cerebral sugiere que la determinación de la orientación sexual de un individuo depende del estructura y desarrollo del hipotálamo en la conformación fisiológica del sujeto, desarrollo que puede presentarse en distintos procesos bioquímicos que se relacionan con la teoría de determinación in utero.


La diferencia en la estructura cerebral corresponde a cada uno de los género binarios y las distintas orientaciones sexuales, ya que se presentan diferencias apreciables en la proporción del hipotálamo de las muestras según su género u orientación sexual. En el año de 1990, Dick F. Swaab y Michel A. Hofman, determinaron características del dimorfismo sexual cerebral que se manifestaba en una distinta proporción de tamaño en el núcleo supraquiasmático entre varones heterosexuales y varones homosexuales (estudio que estableció la base para determinar las componentes biológicas de la determinación de la transexualidad). El experimento de Swaab y Hofman consistió en el sometimiento de ejemplares de ratas al tratamiento con ATD (1,4,6-Androstatriene-3,17-dione), un componente químico Inhibidor que evita la transformación de la testosterona en estradiol, capaz de alterar el comportamiento social y sexual animal.43​ El experimento concluyó en la presentación de resultados en tres distintas poblaciones de ratas. Las ratas que fueron tratadas pre-natalmente y post-natalmente con ATD presentaron una mayor cantidad de neuronas concentradas en el núcleo supraquiasmático, además de que una muestra de dicha población presentó comportamiento bisexual. La tercera población de ratas no se sometió a ningún tratamiento, por lo que no manifestó comportamientos extraordinarios. Los resultados obtenidos de la observación del grupo de ratas sirvieron de base para la hipótesis que sugiere que un número elevado de neuronas vasopresoras en el núcleo supraquiasmático de un masculino adulto homosexual puede reflejarse en las diferencias en la interacción de las hormonas sexuales y el desarrollo cerebral pre-natal y post-natal.44​45​ El estradiol es frecuentemente relacionado con una importancia estructural que lo liga a la diferenciación de la estructura cerebral de ambos géneros binarios, pudiendo tener resultados como un determinante hormonal pre-natal del comportamiento sexual humano.
Parafilias

Una parafilia es un patrón de comportamiento sexual en el que la fuente predominante de placer se encuentra en objetos, situaciones, actividades o individuos atípicos. No existe un consenso para establecer un límite preciso entre el interés sexual inusual y la parafilia. Incluso existe debate sobre si alguna de las consideradas parafilias deberían figurar en los manuales de diagnóstico o no.
El número y taxonomía de las parafilias también es controvertido; algunas fuentes listan hasta 549 tipos de parafilias. El DSM-5 tiene especificados ocho desórdenes parafílicos. Se han propuesto varias subclasificaciones de las parafilias pero algunos argumentan que un enfoque psicológico completo podría reflejar mejor la evidencia.
En 1987 la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (American Psychiatric Association) eliminó el término «perversión» del DSM y de la terminología psiquiátrica mundial. Desde esa fecha en adelante se denominan «parafilias».
Las consideraciones acerca del comportamiento considerado parafílico dependen de las convenciones sociales imperantes en un momento y lugar determinados. Ciertas prácticas sexuales, como el sexo oral o la masturbación, fueron consideradas parafilias hasta mediados del siglo XX, aunque hoy en día se consideran prácticas no parafílicas, siempre que la actividad del sujeto no se límite únicamente a ellas. Por ello resulta imposible elaborar un catálogo definitivo de las parafilias.
Las definiciones más usuales recogen comportamientos como el sadismo, el masoquismo, el exhibicionismo, el voyeurismo, la zoofilia, la coprofilia, la necrofilia, el fetichismo y el frotismo.

Parafilia versus erotismo.

Cabe destacar que la práctica de algunas conductas sexuales inofensivas aunque poco comunes no implica una parafilia por si misma.1 No se vive en una situación de parafilia si la práctica sexual poco habitual cumple estas tres condiciones:
Estas prácticas sexuales no son la única forma con la cual la persona alcanza goce sexual y puede obtener un orgasmo, sino que sean sólo una forma de sexo casual, voluntaria y no indispensable ni obsesiva para la práctica sexual. Por ejemplo, una pareja que practica el sadomasoquismo o la asfixiofilia con cierta regularidad, pero pueden sostener otro tipo de relaciones sexuales si así lo desean. En estos casos el fetiche se convierte únicamente en una práctica erótica que "condimenta" la relación, pero no en la relación en sí.
Si estas prácticas sexuales no causan daño físico, psicológico, económico, etc., a la persona que la practica o a las personas que están involucradas en la práctica. Se torna patológica cuando afecta nocivamente de forma objetiva la vida de la persona practicante, de quienes la rodean o de la sociedad en general. Ejemplo: un sádico sexual es inofensivo en tanto que sus parejas, adultas voluntarias, participen consentidamente en el acto sexual con las medidas de seguridad adecuadas. Se torna peligroso y parafílico cuando el sádico está descontrolado y se aboca a violar y torturar víctimas indefensas.
Cuando los involucrados son personas conscientes y voluntarias que participan del acto de forma consensuada. Esto, naturalmente, es imposible en algunas parafilias claramente transgresoras donde el objeto de placer del paráfilo no está en condiciones nunca de dar su aprobación y la relación sexual siempre puede causar daño como en la pedofilia, el frotismo y la somnofilia.
En síntesis no toda práctica erótica poco tradicional es una parafilia. Se torna como tal cuando deja de ser saludable y controlable por el individuo y cuando es evidentemente destructiva y enfermiza. Aquel que "guste de esposar a su pareja a la cama de vez en cuando" no es parafílico como si lo sería aquel "incapaz de tener relaciones si la persona no está esposada a la cama"

Origen de las parafilias.
Se han postulado diferentes teorías respecto a las posibles causas de la parafilia, especialmente porque se han registrado todo tipo de parafilias, algunas hasta por objetos y circunstancias claramente no sexuales.
El sexólogo Magnus Hirschfeld considera que la atracción sexual siempre se desarrolla con base a diferentes estímulos individuales del medio. En este sentido todo ser humano tiene "parafilias" o "fetiches" normales y saludables como sería un hombre heterosexual que siente preferencia hacia las mujeres rubias sobre las pelirrojas o hacia las gordas sobre las delgadas, y viceversa. Estos patrones sexuales pueden incluir no sólo aspectos físicos sino objetos —ropa, lencería, uniformes, etc.— para Hirschfeld el fetiche se torna patológico cuando se sobrevalora uno de estos objetos individuales, por ejemplo, los zapatos.
El psicoanalista Donald Winnicott consideraba el origen de los fetiches y parafilias en el objeto transicional. La tenencia de un objeto transicional es normal y sana en casi todos los seres humanos durante su niñez, pero en algunos casos se torna sexual. En todo caso la teoría del psicoanálisis considera que cualquier trauma infantil puede producir un impacto en el inconsciente que posteriormente se traduciría en una práctica neurótica o perversa; es la proyección de la libido.4​
Para algunos conductistas las parafilias y fetichismos son producto del condicionamiento clásico, cuando una persona está expuesta a una práctica sexual específica asociándola a un objeto, sujeto o circunstancia de forma tal que la gratificación sexual se asocia a este condicionamiento. Es decir, de forma similar a como Iván Pávlov logra que un perro asocie el sonido de una campana con alimento y esto hace que el perro salive, un fetichista es alguien que está condicionado para creer que los latigazos en la espalda producen placer sexual.
La teoría de que las parafilias surgen por abusos sexuales no está del todo probada y se considera coloquial. La idea de que todos los pedófilos fueron objeto de abusos cuando eran niños no está del todo comprobada, aunque se han encontrado correlaciones entre personas que sufrieron abuso sexual y luego repitieron este abuso en otros. Aun así ni todos los abusadores fueron abusados ni todos los abusados se vuelven abusadores. No obstante, en efecto, el psicoanálisis postula que los traumas infantiles pueden generar conductas patológicas posteriores, como la compulsión de repetición que podría explicar algunas parafilias. Algunos psicoanalistas incluso postularon teorías respecto a la correlación entre estímulos sexuales tanto placenteros como traumáticos en determinadas etapas del desarrollo psicosexual con ciertas parafilias, por ejemplo, el sadomasoquismo estaría en relación con la fase anal, ya que el sadomasoquismo encuentra placer en el control y la fase anal es aquella donde el niño obtiene goce erótico al lograr controlar su cuerpo, y así sucesivamente.